Si te pasa a ti
Si te ocurre a ti, piensa que no estas solo/a: hay profesionales que te pueden ayudar. Pide su ayuda lo antes posible y confía en ellos, ya que tan sólo eso ya será un gran paso en todo el proceso.
Comprométete con el tratamiento. Intenta seguir las recomendaciones profesionales, planteando tus dudas y miedos de la forma más abierta posible.
Describe el problema sinceramente con tus seres queridos y pide ayudas concretas.
Una vez hablado el problema, intenta que no se convierta en el centro de la conversación con tus seres queridos. No centres tus conversaciones en tu aspecto, lo que has comido, cuánto pesas... Habla de otros temas, comparte áreas de tu vida que no sean la alimentación o la forma corporal.
Recuerda que eres mucho más que todo eso.
Comparte cómo te sientes: recuerda que las emociones son nucleares en los trastornos alimentarios.