Los residentes de Enfermería Familiar y Comunitaria han sido premiados por un trabajo sobre la fragilidad en el anciano
- El estudio de investigación se ha desarrollado en 65 pacientes mayores de 70 años de los tres centros de salud de Cuenca capital.
- El resultado desprende que es necesario hacer el cribado de fragilidad en Atención Primaria con el fin de conocer a los ancianos frágiles y poder prevenir sus secuelas.
Los residentes del Área Integrada de Cuenca de Enfermería Familiar y Comunitaria, Patricia Martínez Portero, Cristina Megia Bustos, Alejandro Gonzalez López y Alba Soriano Cano, junto con su tutora, Beatriz Cervera, han sido premiados por su trabajo de investigación sobre ‘Criterios de fragilidad en población anciana' en el II Congreso de Investigación de Enfermería y Fisioterapia.
Los residentes han explicado que el objetivo del estudio “era evaluar la prevalencia de fragilidad de los pacientes mayores de 70 años de la población de Cuenca”.
La fragilidad es un estado fisiopatológico que predispone al anciano que la tiene a una mayor vulnerabilidad a tener efectos adversos, debido a un declive en varios sistemas corporales con disminución de la reserva funcional.
Tras la investigación, realizada gracias a la colaboración de 65 pacientes mayores de 70 años de los tres centros de salud de Cuenca capital, se ha observado que la prevalencia de fragilidad es más elevada que la encontrada en otros estudios.
Los residentes han apuntado que estos resultados “pueden ser debidos al método de captación, ya que se seleccionó una muestra de pacientes con morbilidades o situaciones clínicas concretas, lo que ha podido predisponer al desarrollo de fragilidad”.
Para terminar han subrayado que “la conclusión del trabajo es que es necesario realizar el cribado de fragilidad en Atención Primaria, con el fin de conocer a los pacientes frágiles y prefrágiles, y desarrollar intervenciones para prevenirla o disminuir sus secuelas”.
Materiales y método de investigación
Para la realización de la investigación el grupo de trabajo realizó la captación de los pacientes cuando acudían a la consulta de Enfermería por cualquier motivo. Se pidió la participación de 70 personas.
Para la valoración de fragilidad se utilizaron los criterios de Fried, mediante la entrevista se recogieron datos sobre el agotamiento, si habían perdido peso en el último año y se midió la debilidad muscular con un dinamómetro, teniendo en cuenta el IMC y sexo.
Además se valoró el tiempo que tardaban en recorrer una distancia de 4 metros (lentitud de la marcha) con un cronómetro y para evaluar el nivel de actividad física se empleó el cuestionario de actividad física de Yale para la población anciana.